Unos días estuve en Córdoba antes de ir a la boda en la rioja, allí pude pasear he ir viendo un poco como es la ciudad y los distintos detalles que me fueron llamando la atención. El primer día salimos la Belén primero a comer con le Aston y después a pasear por el centro a ver las innumerables iglesias que esta ciudad tenia.
En cierta medida y manteniendo las distancias por supuesto me recodaba mucho a granada por tantas iglesias y por la juventud que una cuidad universitaria respira.
Entre los detalles que me llamaron la atención fue lógicamente los kioscos y no los de los periódicos precisamente. Los quioscos son tiendecitas familiares que lo mismo te vende tabaco, que pan que alfajores, etc… otra fue el lenguaje si uno no puede ir cogiéndose las patatas y menos recoger la maleta, no señores uno agarra no coge; para mi fue complicado y en alguna ocasión los coloretes se me subieron por la situación. En ese primer paseo un sitio interesante fue el parque de la flores y es que aparte de ser un sitio agradable por lo que parece cada día montan un chirridito reivindicativo ese día en concreto tocaba a los que reclama que le sean devueltas las isla Malvinas
que bueno para no extenderme mucho es un caso parecido al tema de Gibraltar. Después de ver ese parque recuerdo que nos fuimos a una pequeña calle con unos carteles colgados de un extremo al otro de la calle yo al principio no sabia muy bien lo que eran esos carteles hasta que en la misma calle pude ver que cada cartel contenía la foto de una persona con su nombre, edad y fecha de su muerte. En ese momento un escalofrío empezó a recorre mi cuerpo y una sensación de angustia y de dolor empezó invadirme, Belén intentaba entrar en una casa vieja mientras de comentaba que era el archivo de la represión y como me temía esas fotos eran de los muertos y desaparecido de la represión. Yo no le dije nada pero me quería ir aun no soy capaz de entender porque me sentí así pero era como si percibiera un gran dolor y este me ahogara, afortunadamente Belén decidió que lo dejaríamos para después y una ver abandonamos el lugar esa sensación desapareció.
Estaba claro que si estaba en argentina un asado tenía que cae y al segundo día de estar allí ya organizamos un asado en el piso.
Así que después de comprar todo lo necesario que si la carne, ensalada, la bebida
que por cierto allá aun es retornable y bueno que os voy a contar allí estábamos todos, Belén Aston, Vane, Gabi, Karen y unos amigos de Vane disfrutando de un rico asado y descubriendo el Fernet con coca cola.
Luego poco a poco el tiempo cambio paso de ser una temperatura agradable a llover y como llueve en Córdoba. Como ellos me hicieron un asado es lógico que yo corresponda con algo así que bueno yo lo hice con una paella mixta que bueno se me quedo un poco corta pero que salio buenísima.
Bueno que voy a decir de los Lomitos que cosa mas rica de bocadillo eso es algo riquísimo igual que las empanadas o lo criollitos si no me controlo me recuperare el peso perdido pensaba porque que bueno estaba todo. Con tanta lluvia solo nos quedaba tomar mate y espera a que llegara el viernes para montado en un ovnibus nos llevara a la Rioja. Otra provincia totalmente distinta a Córdoba.
¡Los asados argentinos son imperdibles!, ¿no conocías la fernet con coca?, es un clásico, es el mejor aperitivo que conocemos, uno nunca se cansa de tomarlo.
ResponderEliminarLas empanadas son un fanatismo, por estos lares las comemos, como mínimo, una vez por semana.
¡¡Qué lindo viajecito te mandaste TITO!!